Una cuna de palets mágica y sorprendente
Antiguamente, cuando no había tiendas para bebés, eran los propios padres o familiares quienes hacían o regalaban una cuna al recién nacido, hecha a mano con sumo cuidado y cariño. Las cunas eran totalmente personalizadas y las podías encontrar en diferentes formas, tamaños y maderas y a cual, más espectacular.
Hoy quiero retroceder en el tiempo y llegar a esa época en la que las cunas no se fabricaban en serie, sino que se fabricaban expresamente para ese bebé, no habiendo dos cunas iguales. Hoy te presento una propuesta espectacular, una cuna salida de un cuento, mágica y sorprendente.
Una cuna espectacular que puedes fabricar tú o algún conocido más mañoso con viejos palets reciclados, desinfectados y trabajados para conseguir resultados como este y que, si no tienes oportunidad de hacerlo, siempre puedes adquirirlo, eso sí, a un precio algo desorbitado: 900 euros en Creme Anglaise.
Y dulces sueños.