No se puede negar que un columpio, sea dentro o fuera de casa, con o sin niños pequeños en casa, es un elemento decorativo, divertido y relajante a partes iguales.
El columpio da ese punto de chispa que le falta a un hogar: para balancearse sobre él, para leer un libro mientras te columpias, para cerrar los ojos y soñar, para compartir una copa de vino junto a tu pareja mientras charláis animadamente sobre él… de una forma u otra, cierras los ojos, sientes el aire y sientes la libertad.
El columpio, sin duda, es un mueble que realizado con palets, aún tiene más encanto.
2 comentarios